Te contaremos datos históricos de cuando Albert Einstein visito Amapala, y del pirata ingles Francis Drake, según el portal de noticias BBC Mundo, indica en un articulo que estos dos famosos personajes estuvieron en Honduras en uno de sus importantes viajes en Centroamérica.
En la nota indican que en Amapala estaba la principal población de la Isla del Tigre, un pequeño pedazo de Honduras en el golfo de Fonseca, era el principal puerto del país en el océano Pacífico hasta finales de la década de 1970.
Según cuenta la leyenda Amapala, era la guarida del pirata inglés Francis Drake. No era un lugar cualquiera, inclusive en la actualidad antes de llegar al muelle destacan las modestas lanchas que van y vienen desde Coyolito, una aldea de pescadores de Honduras.
Amapala, que significa “cerca de los amates” en lengua náhuatl, pero según los isleños «isla del Tigre” es una referencia a Sir Francis Drake.
Esa es la versión que manejan los habitantes de la isla y la que está consignada en el museo local, un espacioso cuarto lleno de referencias a un pasado de la isla.
Otra lámina afirma que en 1579, Francis Drake convirtió a la Isla del Tigre en su guarida o punto de refugio y descanso después de sus correrías vandálicas en todos los puertos que estaban establecidos a lo largo de las costas del Pacífico.
Los indígenas de la zona empezaron a llamarle a la isla «Cerro del Tigre», porque ellos calificaban así a Drake y sus hombres, como unas fieras salvajes y sanguinarias. Según se explica en la lámina, donde se afirma además que no se descarta que el pirata hubiera enterrado ahí parte de sus tesoros
El viaje histórico de Einstein a Amapala
Sin duda alguna Amapala, fue un importante punto de comercio, pero ¿Te imaginas que pudo venir a hacer Alberto Einstein a Honduras?. Bueno resulta que el importante físico alemán pisó la isla de Amapala por unos días.
Según cuentan los registros de esa fecha, estuvo tres días de descarga el barco donde el viajaba y durante esos tres días él fue huésped en la Casa Uhler, donde se hospedaban en la parte de arriba solo a europeos.
El mito resulta tornarse verdadero, pues la respuesta se encuentra en los archivos personales del físico alemán que se conservan en la Universidad Hebrea de Jerusalén.
También, en una postal dirigida al profesor Max Born y su esposa, aparece el nombre de Amapala, claramente escrito. “Amapala, ¡en Honduras! Por eso es que no habían recibido mensajes nuestros”, una carta firmada por Einstein.
La postal, tiene fecha del 29 de diciembre de 1931, casi ocho años antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial, importantes datos históricos de este viaje por América.
Otro dato históricos e importante es este “22 (de diciembre). 8 de la mañana llegamos a la bahía de Honduras. Anclamos en la Isla del Tigre. Esto se lee en el diario llenado por Einstein durante el viaje que lo llevó por segunda vez a Pasadena en diciembre de 1931.
En definitiva, cuando Albert Einstein visito Amapala, Isla del Tigre, paso tres días bastante agradables ya que convivio con algunas personas de la isla, otros europeos y disfrutar de música al aire libre.